RIESGO DE SÍNDROME DE BURNOUT ENFERMERÍA

1º INTERVENCIÓN

  • Introducción del riesgo.


El síndrome de burnout, o más conocido como estrés laboral, en enfermería es un estado de cansancio mental y físico, desmotivación y desilusión que se da en los profesionales de la enfermería. Se caracteriza además por la baja realización personal en el trabajo y despersonalización. Puede ser considerado como un desequilibrio entre las demandas y las capacidades para hacer frente a dichas demandas.

El burnout en enfermería está causado principalmente por la gran carga laboral de esta profesión, lo que lleva asociado un estrés excesivo. Las causas más comunes de padecer este síndrome son las siguientes:
- Continuo y sostenido contacto con el sufrimiento, el dolor y la muerte.
- Caída del valor social de la profesión en nuestro país.
- Sobrecarga laboral.
- No reciben un reforzamiento positivo de lo que realizan.
- Amenazas de sufrir juicios por un mal trabajo.
- Naturaleza de la tarea.
- Resolver dilemas éticos resultantes de las nuevas tecnologías.
- Bajo salario.

El riesgo de estrés laboral en enfermería, posee desgraciadamente una cifra elevada en nuestro país. Para entender mejor de qué se trata este síndrome, es necesario conocer sus características, entre las que se encuentran:
- Falta de realización personal en el trabajo: los profesionales sanitarios que atraviesan esta situación tienden a devaluar su trabajo, en el cual no se sienten motivados ni realizados.
- Agotamiento emocional: la gran carga afectiva presente en enfermería puede desembocar en un cansancio emocional para el profesional.
- Despersonalización.

Debido al gran impacto que puede causar el síndrome de Burnout en el personal de enfermería, es necesario prevenir el contagio y disminuir el riesgo de padecerlo. Para ello, es imprescindible analizar las causas y evitar, en la medida de lo posible los factores desencadenantes de dicho riesgo.

  • Objetivos de prevención del riesgo.


El riesgo de padecer el síndrome de Burnout en enfermería puede disminuirse gracias a la reducción del estrés laboral y a la creación de un clima de trabajo tranquilo y confortable.

Los objetivos que se pueden desarrollar para llevar a cabo la prevención de dicho riesgo son los siguientes:

1) Apoyo emocional: relacionado con el afecto, confianza y preocupación que un individuo experimenta proveniente de otro.
- Proceso personal de adaptación de expectativa a la realidad cotidiana.
- Formación en las emociones.
- Equilibrio de áreas vitales: familia, amigos, aficiones, descansos y trabajo.
- Fomento de buena atmósfera de equipo: espacios y objetivos comunes.

2) Apoyo instrumental: que son los recursos materiales económicos o de servicio con los que cuenta el profesional.
- Limitar a un máximo la agenda asistencial.
- Tiempo adecuado por pacientes: 10 min. de media como mínimo.
- Minimizar la burocracia con mejora en la disponibilidad de recursos materiales de capacitación y mejorando la remuneración.
- Formación continuada reglada dentro de la jornada laboral

3) Apoyo informativo: que la permite a un sujeto conocer una situación y poseer unos instrumentos para afrontarlo.
- Coordinación con compañeros que ejercen la misma especialidad, espacios comunes, objetos compartidos.
- Diálogo efectivo con las gerencias.

4) Apoyo evaluativo: que es un feed-back de las acciones que el profesional va emprendiendo y le permite procesar su efectividad.

  • Explicación de alguna actuación sanitaria.



La forma más efectiva de disminuir el burnout en el personal de enfermería es estableciendo una adecuada comunicación o feedback positivo, entendida como la mejora de los canales de comunicación existentes en la organización. Su desarrollo permitirá a los profesionales de enfermería un clima de confianza en el que se sentirán seguros a la hora de expresar sus sentimientos. 

Además, existen intervenciones que pueden ayudar a disminuir o aliviar la carga de estrés laboral.
- Proporcionar apoyo social que permita afrontar las exigencias laborales.
- Inoculación de estrés. Aumentar la resistencia individual al estrés mediante cursos de formación.
- Proporcionar un estilo de vida sano: dieta, ejercicio y descanso. (comedores con dietas equilibradas, gimnasio gratuito para el personal de enfermería, etc.).
- Aportar recursos humanos, así como los medios necesarios para que las enfermeras puedan realizar correctamente su trabajo.
- Entrenamiento en habilidades de comunicación.
- Abordar los procesos inconscientes relacionados con el síndrome.
- Instauración de un equipo de salud mental, que dé apoyo y asesoramiento psicológico al personal con carácter gratuito, tanto en el medio hospitalario como en atención primaria.
- La carga de trabajo, falta de tiempo y escasez de personal podría solucionarse optimizando la eficiencia del personal y disminuyendo el tiempo dedicado a tareas inespecíficas.
- Uso de terapia racional emotiva y técnicas que ayuden a disminuir el estrés como la meditación.


Idea sobre prevención del riesgo, que consideréis que puede ser más efectiva en la actualidad. Propuesta de nueva forma de prevención.


Actualmente, el 60% de las enfermeras españolas sufren el Síndrome de Burnout. Si se asocia este síndrome a la sobrecarga de trabajo y la demanda actual de personal sanitario, podemos observar que una de las medidas preventivas que pueden ser más efectivas para tratarlo sería elevando el número de profesionales de enfermería por turno y planta. 

Desde mi punto de vista, el número de enfermeras por planta es inversamente proporcional al riesgo de padecer estrés por sobrecarga de trabajo. Es decir, a mayor número de enfermeras, menor será la probabilidad de padecer el síndrome por estrés laboral.
Además, es muy importante el control de los turnos para así evitar la falta de sueño y cansancio, lo que provocaría un menor rendimiento en los profesionales.
Es imprescindible la empatía y la amabilidad en el personal de enfermería, que disminuirá si los profesionales se encuentran en una situación desfavorable laboralmente. Pienso que son cualidades que deben estar presente en todo enfermero, por tanto, hay que primar por la seguridad mental de estos para poder asegurar un buen desempeño de la actividad laboral.


Material multimedia: videos, imágenes representativas, canciones, …

- “Para prevenir el ‘burnout’ hace falta formación”
- “8 de cada 10 enfermeras sufren estrés”
- La siguiente imagen representa a una enfermera que sufre en el hospital.
Ese sufrimiento puede estar provocado por una sobrecarga laborar o un elevado estrés.

  • Conclusión



El papel de la enfermería tiene como objetivo principal el cuidado de las personas que lo necesitan. Sin embargo, para cuidar hay que cuidarse. Un profesional de enfermería no puede prestar sus servicios si se encuentra psicológicamente afectado.

Es frecuente que se produzcan situaciones en las que la enfermera empatice más de lo necesario con el paciente, por lo que es importante saber construir una barrera profesional para evitar que los problemas de los pacientes nos afectan en nuestras situaciones personales.
Pero lo más preocupante, sin duda, es cuando la propia afectación psicológica procede de la elevada carga laboral o el excesivo estrés al que se someten los profesionales de enfermería diariamente. 
Para paliar esta situación es necesario asegurar el correcto bienestar físico, psíquico y social del personal de enfermería, para que sus relaciones laborales entre compañeros sean fructíferas y el trato impartido a los paciente sea lo más adecuado y correcto posible.

  • Referencias.
- Grazziano, E. S., & Ferraz Bianchi, E. R. (2010). Impacto del estrés ocupacional y burnout en enfermeros. Enfermería Global, (18), 0-0.
- Zavala Zavala, J. (2008). Estrés y burnout docente: conceptos, causas y efectos.
- Martínez-López, C., & López-Solache, G. (2005). Características del síndrome de burnout en un grupo de enfermeras mexicanas. Archivos en medicina familiar, 7(1), 6-9.
- Thomaé, M. N. V., Ayala, E. A., Sphan, M. S., & Stortti, M. A. (2006). Etiología y prevención del síndrome de burnout en los trabajadores de la salud. Revista de Posgrado de la VIa Cátedra de Medicina, 153(1), 18-21.
- Garcia, G. M. (2007). Síndrome de burnout y riesgos psicosociales en personal de enfermería. Prevalencia e intervención. Informació psicológica, (91-92), 23-31.

2º INTERVENCIÓN

Para llevar a cabo la segunda intervención he comentado la publicación de mi compañero Sergio Rodríguez González, que trata un tema muy interesante, como es el RIESGO POR ESTRÉS TÉRMICO O TEMPERATURAS AMBIENTALES EXTREMAS.

El tema tratado por mi compañero me parece muy interesante, ya que está presente en nuestro día a día y no siempre se le presta la atención oportuna, Los cambios bruscos de temperatura entre distintas zonas del hospital son imprescindibles. Sin embargo, se debe de moderar la exposición a ellos. Para reducir el riesgo por estrés térmico, coincido absolutamente con las actuaciones aportadas por mi compañero. Además, creo que sería conveniente que en zonas donde habitualmente hace frío, como pueden ser los quirófanos, los sanitarios puedan ir más abrigados para no exponerse de tal forma al cambio de temperatura. También creo que es importante destacar, el cambio de temperatura que sufren los enfermeros cuando entran y salen del hospital. En invierno, por ejemplo, suele haber en el exterior una baja temperatura y en el interior, las calefacciones la elevan demasiado para obtener un mayor confort en los pacientes. En el verano, sucede lo contrario. Esto puede desencadenar un cambio brusco de temperatura, que puede debilitar el sistema inmune de los sanitarios y provocar resfriados o gripes estacionales. Por otro lado, el personal del sistema sanitario móvil, creo que está mucho más expuesto a los cambios de temperatura y por consiguiente en riesgo de sufrir estrés térmico. Para reducirlo, sería conveniente adecuar los uniformes de trabajo según la temperatura ambiental y aconsejarle pautas para evitar los golpes de calor o el frío excesivo. Ejemplos de estas pautas pueden ser el mantenerse correctamente hidratado durante la jornada laboral, evitar la exposición directa al frío y calor o atender a los pacientes en lugares cálidos (en invierno) y frescos (en verano) en la medida de lo posible. Para concluir, me gustaría apuntar que, a pesar de que los enfermeros y el personal sanitario en general pueden llevar a cabo pautas y consejos para reducir los cambios bruscos de temperatura, es la administración la que debe regular este tema, dotar al personal de más recursos y ayudarle a que puedan desarrollar su trabajo en las mejores condiciones.

3º INTERVENCIÓN

El riesgo de padecer el síndrome de Burnout es cada vez más frecuente en nuestro país. He decidido trabajar este riesgo porque me parece que es un tema ya instalado en la sociedad y que por eso, no se le da la importancia que requiere. El estrés laboral es perjudicial para la salud de la población, por tanto, es muy probable que altere las propias capacidades de cada trabajador para desempeñar su rol. 
Desde mi punto de vista, creo que es necesario dotar a los profesionales sanitarios de nuevos y más recursos para poder trabajar su salud emocional y mental, porque la prevención evitará que se llegue al extremo de sufrir estrés laboral. 
Pienso que los grandes responsables de esta situación son los políticos, que debido a sus recortes en sanidad, han conseguido que cada vez la sobrecarga de trabajo sea mayor. Además, si se crean cursos de auto ayuda, los profesionales sanitarios encontrarán un vehículo por el cual expresar sus emociones. 
Por último, creo que la comunicación entre administraciones debería ser más fluida, y que se haga más accesible la posibilidad de poder manifestar el estrés a los superiores.

En la segunda intervención, he decidido comentar la entrada de mi compañero Sergio Rodríguez, que trata el riesgo de estrés térmico. Como he apuntado anteriormente, me parece un tema muy interesante ya que son constantes los cambios bruscos de temperatura a los que están sometidos los sanitarios. 

Este riesgo, por desgracia, está tan asumido por parte de la sociedad, que no se le presta atención, pero a la larga, puede desencadenar consecuencias perjudiciales para la salud. El hecho de trabajar en un ambiente confortable tiene múltiples beneficios por eso me parece muy necesario llevar a cabo las pautas que disminuyen dicho riesgo, y así conseguir que los sanitarios realicen su trabajo de la forma más cómoda y adecuada posible.


Comentarios

  1. El riesgo propuesto por mi compañera Julia pienso que es uno de los más importantes que se deben prevenir para que las enfermeras podamos trabajar adecuadamente. Ya que padecer el síndrome de Burnout es muy peligroso para el sistema sanitario debido a que no podemos cuidar si nosotros mismos no estamos capacitados.

    El personal sanitario está indefenso ante este problema por una falta de aplicación de mecanismos y políticas de prevención. Pienso que la nueva propuesta de mi compañera sería muy factible si se llevara a cabo correctamente, pero si no invertimos en sanidad, lo corriente es que este síndrome se expanda.
    Así que, si lo anterior no fuera posible, lo mejor sería darle un cambio de enfoque a las distintas situaciones de nuestros pacientes para que no nos afecte en lo personal.

    "Lo que nos produce la emoción no es lo que nos pasa, sino el cómo nos tomamos lo que nos pasa" (Ramón González Correales).

    Con lo cual, mi propuesta sería incrementar la autoestima y mejorar las habilidades sociales del personal sanitario que pueda padecer este síndrome o lo está padeciendo.


    María Galán del Toro

    ResponderEliminar
  2. Es un tema que aparte de parecerme muy interesante, considero que es de gran relevancia en la actualidad.
    Me parece importante ya que este síndrome dificulta el satisfactorio desempeño del trabajo. Producido por contacto directo con usuarios de un servicio prestado entre otras causas que ya el compañero ha descrito.
    Este fenómeno se encuentra latente en profesionales dedicados al sector de la enfermería.
    Coincido con los objetivos que has expuesto.
    Además de las actividades ya propuestas, veo muy interesante una serie de estrategias relacionadas con la prevención a nivel individual, interpersonal y organizacional ante una situación que se considera amenazante, y que tienen por objetivo saber gestionar el estrés producido.
    En cuanto a las individuales o personales pueden realizarse en cualquier momento incluso antes de la aparición del Burnout. El propósito es que el individuo aprenda estrategias que le permitan hacer frente al estrés y prevenir así sus consecuencias y sin desatender sus autocuidados.
    Algunas de las estrategias serían no sobrecargarse de tareas que no forman parte de la rutina diaria. Desahogarse ante situaciones preocupantes. Hacer reuniones periódicas para acotar las tareas que cada persona puede asumir sin desbordarse, aprender a controlar las emociones. Pedir ayuda en momentos de presión
    En cuanto a las grupales e interpersonales se presta atención al deterioro de las relaciones interpersonales que se establecen en el entorno laboral. Para prevenirlas se puede destacar algunas estrategias como el apoyo social en el trabajo, escucha activo, apoyo técnico (reconocerle a un compañero su buen trabajo) apoyo emocional.
    Se puede trabajar también las habilidades sociales como la capacidad de decir no, pedir favores, expresar sentimientos….
    Las estrategias organizacionales son muy relevantes ya que el problema se encuentra en el contexto laboral por lo que la dirección de la organización debe de fomentar programas de prevención orientados a mejorar el ambiente y clima de la organización.
    Algunas de estas estrategias son: promover el trabajo en equipo, incremento del grado de autonomía y control del trabajo, definir los puestos de trabajo eludiendo ambigüedades y conflictos de rol, establecimiento de líneas concretas de autoridad y responsabilidad, incremento de los incentivos a los trabajadores, mejora de las redes de comunicación, fomento de la participación y colaboración en la organización, mejorar la seguridad en el empleo etc…

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

RIESGO DE EXPOSICIÓN A RADIACIONES IONIZANTES

Riesgo de exposición a radiaciones ionizantes

Riesgo de cortes/pinchazos por objetos o instrumental clínico